Testimonio de un ex carnívoro







En esta entrada de blog escribiré sobre el testimonio de una persona que tuvo que cambiar sus hábitos alimenticios y dejar la carne, sólo alguien que ha vivido esa decisión puede narrar la experiencia que ha sido transformar su alimentación y su vida.

¿Quién es?

Toso es un hombre de 36 años originario de la CDMX que comenzó un “despertar de conciencia” desde mediados de 2010. ¿Qué significa esto? Autoconocimiento y significa preguntar ¿Qué es lo realmente importante a mi propia vida? La respuesta a esta pregunta personal no tiene un solo camino o tiempo.

¿Cómo te iniciaste en el camino de la comida verde?

Provengo de una familia carnívora y con ciertos hábitos que a la perspectiva de la conciencia no son armónicos con la salud. Hay problemas de alcohol, cigarro, workaholik y ese fue mi lugar muchos años. El tema de cambiar fue una exploración profunda que inició con un salto en paracaídas, eso me permitió saber que la vida es mucho más significativa que beber, comprar, consumir y satisfacer los placeres. Ha sido un camino de 9 años donde aún sigo trabajando por seguir conociéndome, sin embargo el salto de paracaídas movió todo. De ahí me llegaron muchas tomas de decisiones, entre ellas el vegetarianismo que requiere de cierta valentía.
El 17 de julio 2015 salí de Vipassana, un curso de meditación de 10 días y decidí cocinarme mi último corte de carne.

Ir tras el amor…

Antes de entregarme al vegetarianismo seguía bebiendo alcohol, lo intenté un par de veces porque una novia mía era vegetariana, pero no lo lograba porque aún seguía con hábitos tóxicos. No aguante ni un mes comiendo verduras porque bebía alcohol y las crudas necesitan forzosamente carne. Entonces antes de comer bien llegó el día cero para mí y primero dejé el alcohol el 30 de mayo de 2015.
Hablar de mejorar la vida es hablar de cuerpo, mente, emoción y espíritu. Para mí todo se empezó a mover.

No es una moda

Cada quién va andar su propio camino, a su tiempo para descubrir las decisiones trascendentales de la vida que encuentran una firme determinación cuando se dan desde la conciencia. Por ejemplo, yo dejé el alcohol por conciencia y no por fuerza de voluntad, ya que por el entorno es posible que te vuelvas a meter a esas cosas. Por conciencia también dejé la carne ya que para mi practica de meditación me hice más ligero.
“Yo no como nada que haya tenido mamá” pez, vaca, cerdito y lo que yo hago es practicar ovolacteoapivegetarianismo, es una práctica, no una dieta.

La costumbre

Para las personas que busquen comer mejor les preguntaría ¿Cuál es tu intención con ese propósito? Todo surge de esa pregunta, la intención para migrar a esta alimentación es clave para entender si amo a los animales o me los voy a comer.
Recomiendo practicar una técnica de meditación para enfocar las sensaciones y si te da hambre puedas controlar qué comer, escuchar tu cuerpo y entender qué necesitas.
Disciplina para observar los antojos y diferenciar si es apego o puedo desprenderme de ello.

La opción

El vegetarianismo es un sendero para atender el amor propio, que es el amor a la vida, que tiene muchos beneficios siempre y cuando se lleve con una sana intención, disciplina y conciencia. No es para quedar bien con la gente.

Que todos los seres sean felices.

Para saber más sobre Toso puedes visitar:

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Toso en Tándem

AdiTi

Nos leemos la próxima semana.
Irais Morales
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