Por las redes sociales circula infinidad de información y
esa vorágine se ha gestado a partir del auge de Facebook y Google, dos
plataformas que clasifican, jerarquizan y ordenan la información de acuerdo a
tus preferencias de consulta o de clicks.
Los principales diarios comenzaron a recibir quejas porque
sus noticias eran falsas o inventaban datos irreales para manipular a la
opinión pública, este tipo de noticias son las que circulan en campañas
políticas, junto con innumerables spots que giran en torno a las “propuestas”
de campaña. En México la carrera presidencial empieza el 1ro de enero del 2018
y junto con ella circularán en la red incalculables notas acerca de los
políticos, sus errores, sus estilos de vida y todo aquello que los represente.
Google y Facebook han intentado combatir el cáncer de las
noticias faltas utilizando algoritmos que detectan key words o la veracidad de
los portales que las suben; de esa forma se bloquea la información para que no
llegue a viralizarse, sin embargo como en todas las campañas un poco de dinero
o hacer campañas publicitadas en Facebook harán que las noticias salgan a la
luz de una u otra forma. Con todas estas estrategias, en el 2018 se volverá muy
difícil distinguir qué información es real o no.
Otro elemento que tendremos para el próximo año serán las
consecuencias de esas noticias falsas, que serán muy verdaderas, por ejemplo,
recordemos el caso de Ovidiu Drobota, un joven rumano de 24 años, fundador de
Ending the Fed, una comunidad de Facebook que cuenta con más de 350.000
seguidores que generó cuatro de las diez noticias falsas de mayor audiencia
durante las elecciones presidenciales que consagraron a Donald Trump. Drobota
factura aproximadamente US$10.000 por mes usando Google AdSense, la plataforma
de venta de publicidad del gigante de Silicon Valley.
En México los gastos de campaña se van a controlar en
medios tradicionales, sin embargo en las redes sociales el terreno es fértil y
ahí se pueden insertar campañas de muchos miles de pesos para posicionar a un
candidato, descalificar a otro o simplemente exhibirlo, el dinero que entra a
las redes no está regulado en ninguna ley y ahí tendremos la verdadera batalla electoral.
Los hábitos de lectura digital que tenemos los mexicanos
van a ser un impedimento para poder hacer un filtro adecuado de la información,
podría resultar muy difícil distinguir qué noticias son veraces, cuáles fueron
inventadas para descalificar o posicionar a un candidato o cuáles son reales.
En estos casos y para estas elecciones nos convendría aumentar el hábito de
lectura digital o en algo.
Nos leemos la próxima semana
Irais Morales
Social Media Promotwist
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